Pero esto en realidad no produce este efecto, sino el contrario ya que suceden dos cosas que pueden perjudicar nuestra dieta y alcanzar los objetivos de perder peso y quemar grasas.
Primero, esto nos da una ansiedad mayor lo que puede hacer que cuando podamos consumir estos alimentos, lo hagamos sin limite ya que hacia tiempo que no lo hacíamos, y esto es muchísimo peor que consumirlos esporádicamente.
Otro gran problema que puede causar prohibirnos alimentos es que puede ayudar a que abandonemos la dieta que estábamos haciendo ya que nos estamos reprimiendo de lo que nos gusta, y esto es tomado por nosotros mismos como un castigo, y a nadie le gustan los castigos.