- Yaciendo boca arriba en el suelo, se doblan las rodillas y colocan las manos al lado de la cabeza o sobre el pecho.
- Se trata de que la espalda quede completamente en contacto con el suelo.
- Lentamente se contraen los abdominales, llevando los omóplatos a unos diez o doce centímetros sobre el nivel del suelo.
- Se exhala al subir, manteniendo el cuello derecho y el mentón en alto
- Se mantiene la posición unos segundos, respirando todo el tiempo.
- Lentamente se vuelve a la posición inicial, pero sin llegar a relajarse completamente.
Se puede agregar variedad levantando las piernas (sin variar su posición) al tiempo que se eleva la parte superior del cuerpo. Además se pueden hacer sobre una pelota de goma específica para el propósito, o una pelota de yoga. Es importante que la espalda no se curve durante el movimiento, si esto ocurre se pueden colocar los pies bajo una barra fija para que resulte más fácil.